Parece que después de tanto tweet, el multimillonario Elon Musk busca desaparecer del panorama de las criptomonedas y se lava las manos afirmando que solo posee una pequeña cantidad de bitcoin.
Para decepción de muchos, Elon Musk ya no quiere ser el criptoinfluencer que parecía hace tan solo un año o unos meses.
Ante la tormenta de volatilidad y caída en picado que estamos viviendo en el mundo de las criptomonedas, parece que el multimillonario quiere dar un paso hacia atrás.
Recientemente pudimos conocer la millonaria demanda a la que actualmente se enfrenta por parte de los inversores de dogecoin. Hablamos de una demanda colectiva presentada el jueves en un tribunal de Manhattan por un inversor de dogecoin que acusa a Elon Musk, Tesla y SpaceX de operar una empresa ilegal de con la que buscan inflar a su merced el precio de la criptomoneda.
Y es que, cada vez que este ha publicado un tweet de esta criptodivisa, los precios se han disparado. Recordemos tan solo el 20 % de subida que experimentó a finales de diciembre de 2021, cuando este tuiteó que Tesla iba a admitir dogecoin com forma de pago.
Hace unos días tuiteó que continuará la acumulación de Dogecoin incluso después de la caída del memecoin en el mercado de criptomonedas. Este tuit influyó en que el precio de Dogecoin subiera un 6 %.
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Es por todo esto que se le acusa de controlar las subidas y bajas del precio y ser el responsable de los daños entre los inversores que han perdido dinero.
Musk, además afirma que solo posee una pequeña cantidad de bitcoin, algo que ya todos sabemos que es mentira. El mercado de las criptomonedas tiene suficientes datos de que Elon posee más que una pequeña cantidad de bitcoin.
La reciente inversión de 1.500 millones de dólares de bitcoin para Tesla ha convertido a Elon Musk en uno de los mayores inversores de bitcoin en el mercado global.
Este incluso menciona que jamás dijo de invertir en dogecoin o bitcoin a través de sus tweets y en esto, ciertamente, lleva razón. Musk nunca alentó a los criptoinversores en apostar por una u otra en sus crípticos tweets, por lo que podemos afirmar que es una influencia basad en la confianza y no en las palabras de un gurú.
