El gobierno de Pedro Snchez solicit a la Unin Europea que retire las sanciones impuestas contra la revolucin bolivariana
La maniobra del gobierno de Pedro Snchez para que la Unin Europea (UE) retire las sanciones impuestas contra la revolucin bolivariana ha provocado la respuesta de Mara Corina Machado, nueva lder opositora tras barrer en las elecciones primarias del domingo pasado. «Es muy difcil que puedan salirse de unas elecciones limpias y libres, en las cuales sus propios aliados, llmese Lula (da Silva, presidente de Brasil), (Gustavo) Petro (presidente de Colombia), AMLO (Andrs Manuel Lpez Obrador, presidente de Mxico), Alberto Fernndez (presidente de Argentina) o el propio gobierno espaol les estn animando a cumplir. La conclusin de la Conferencia de Bogot de los 20 pases presentes, incluyendo los aliados del rgimen, es que hay que ir a elecciones», precis Machado durante una entrevista con CNN.
La iniciativa de Jos Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, contempla que Bruselas no prorrogue un ao ms las sanciones que impiden viajar a la UE a 55 miembros de la lite revolucionaria, entre los que se encuentran la vicepresidenta Delcy Rodrguez, generales, jueces y varios de los torturadores ms conocidos del sistema represivo chavista. Las sanciones tambin incluyen el embargo de armas, con el objetivo de frenar la represin interna.
La excusa utilizada por Albares para dar este paso, que ha cado como una bomba entre oposicin y sociedad civil, se basa en «las recientes decisiones de Estados Unidos y vista la evolucin positiva del dilogo entre venezolanos».
«Es llamativa la calificacin al gobierno de Espaa como aliado de Maduro porque fue uno de los 12 pases que envi un representante diplomtico a una reunin con Machado en su comando de campaa el pasado 24 de octubre», subray Mariano de Alba, asesor senior del Crisis Group. De hecho, el diplomtico espaol fue el nico de los sealados que asisti a esa cita, en la que por Amrica Latina slo formaron parte Panam, Per y Repblica Dominicana.
«Aunque han surgido reportes de una supuesta oposicin de Alemania y Pases Bajos a un plan espaol de levantar sanciones a Venezuela, hay coincidencia en Europa que dada la respuesta de EEUU y si la implementacin del Acuerdo de Barbados avanza, la UE tambin actuar», desvela De Alba.
Un dilogo que transcurridos slo nueve das de la firma de Barbados est de nuevo en crisis, tras la embestida furiosa del chavismo contra la Comisin Nacional de Primaria (CNP), responsable de la gesta histrica de las elecciones autogestionadas de la oposicin, realizadas contra viento y marea y que cosecharon 2,5 millones de votos. La Fiscala General de la Repblica acusa a los miembros de la CNP de usurpacin de funciones, usurpacin de identidad, legitimacin de capitales y asociacin para delinquir. Aliados de Maduro exigen su detencin inmediata.
Entre los acusados se encuentra en primera fila el presidente de la CNP, Jess Mara Casal, decano de la Escuela de Derecho de la Universidad Catlica Andrs Bello convertido hoy en un hroe popular. Casal ha conducido un proceso casi imposible, con la ayuda de miles de voluntarios y testigos y sin el respaldo del Consejo Nacional Electoral (CNE), lo que oblig a usar todo tipo de instalaciones para albergar los 5.000 centros electorales. Entre ellos los hogares de simpatizantes en los barrios ms populares del pas, pese a las amenazas de los consejos comunales del chavismo.
«Estamos ante una violacin de los Acuerdos de Barbados», insisti ayer Machado durante su proclamacin como candidata unitaria de la oposicin. Muy similar opina Gerardo Blyde, jefe de la delegacin negociadora opositora, quien ha repetido que la judicializacin de «un proceso interno protegido por el acuerdo puede implicar un grave problema para su cumplimiento, por lo que reclamaremos ante la comisin de verificacin y seguimiento de manera contundente».
Desde el chavismo se asegura hasta la extenuacin que Machado no ser candidata por nada del mundo, incluso Jorge Rodrguez, jefe de la comisin negociadora chavista, apareci en las televisiones pblicas para asegurar que con «fascistas» no se dialoga.
«Sin tener dones adivinatorios, creo que tras una breve promesa de apertura, Venezuela va hacia un modelo similar al nicaragense. Los ms duros harn imposible que Machado participe en elecciones. Sus costos son muy elevados», vaticin el politlogo ngel lvarez.