Los ministros de Asuntos Exteriores de los 27 recalcan que los «castigos colectivos» con injustos
Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unin Europea han reafirmado su condena y su repudio al «acto brbaro e inhumano» perpetrado durante el fin de semana por Hamas, han refrendado el derecho a defenderse de Israel y han marcado distancias con la organizacin que considera terrorista y que tiene el poder en la Franja de Gaza. Al mismo tiempo, han condenado tambin «todos los ataques a civiles», han pedido «respeto a la ley humanitaria» y que no haya «bloqueo de agua, comida o electricidad para la poblacin civil en Gaza«. Igualmente, el alto representante para la Poltica Exterior, Josep Borrell, ha reclamado a Israel que permita «corredores humanitarios para facilitar la salida de quienes huyen de las bombas hacia Egipto«, pues «los castigos colectivos son injustos y van contra los intereses de todos».
El alto representante convoc ayer de urgencia a los responsables de Exteriores para valorar lo ocurrido, escuchar la posicin de cada uno de los 27 y «empezar a pensar en el da despus», segn ha explicado desde Omn, donde estaba ya previsto un encuentro con varios de los pases del Golfo. Algunos de los ministros europeos estaban en persona, pero la mayora se ha unido por videoconferencia.
Los europeos han tenido que hablar entre ellos porque ni el israel Eli Cohen ni el palestino Riad Malki han aceptado la invitacin cursada para que explicaran de primera mano lo que est ocurriendo. Y, segn el resumen ofrecido por el alto representante, hay varios amplios o «abrumadores consensos». El primero, la denuncia de la barbarie cometida por los asesinos de Hams contra civiles desarmados, familias y nios. El segundo, el derecho a defenderse de Israel. Y el tercero, «con slo dos o tres» discrepancias, dijo Borrell, que la ayuda a Palestina debe mantenerse y no cortarse.
El lunes, el comisario de vecindad, el hombre de Viktor Orban en Bruselas, anunci la suspensin inmediata de toda la ayuda al desarrollo a Palestina mientras se hace una evaluacin en profundidad de cada euro gastado, para asegurarse de que nada termina en manos de terroristas. Horas despus, y cuando medio planeta haba interpretado que se cortaba tambin la ayuda humanitaria en un momento crtico, la Comisin Europea tuvo que desmentir al comisario, asegurando que ni se tocaran las partidas humanitarias, ni habra «suspensin de pagos» mientras se audita. Y este martes fueron incluso ms lejos, arrojando al hngaro Varhelyi a los caballos al decir en pblico que lo que dijo fue iniciativa propia, sin consultarlo con nadie, y menos con la presidenta Von der Leyen.
Borrell ha insistido mucho desde Omn en esa cuestin. Diplomticos europeos por todo Oriente Prximo han avisado a Bruselas de que su posicin estara muy comprometida, e incluso su seguridad, si se hiciera un corte tan abrupto y de que no tendra sentido asegurar que ni un euro ha ido a Hams para luego penalizar a dos millones de civiles de golpe, que necesitan ese dinero para sobrevivir.
«Hams es una organizacin terrorista y se comportan como tal, pero la Autoridad Palestina es otra cosa. Son nuestros socios, trabajamos con ellos. No todos los palestinos son terroristas, as que el castigo colectivo ser injusto, nada productivo, contra los intereses de todos y de la paz», dijo el dirigente espaol. «Una abrumadora mayora, con dos o tres excepciones, cree que la cooperacin con la Autoridad Palestina debe seguir, la financiacin debe seguir y los pagos no deben ser interrumpidos (..) Si descubrimos que hemos financiado a Hams, alguien tendr que asumir responsabilidades polticas. No creo que haya ocurrido, pero comprobmoslo. Lo extraordinario de la situacin hace que quizs sea necesario un examen ms en profundidad, pero la mayora insiste en que no puede ser excusa para congelar la cooperacin. Este acto barbrico que ha dejado tantas vctimas, tantos muertos, ha provocado la reaccin de las fuerzas de Defensa israeles, que causarn sufrimiento humano. Las victimas aumentan en Gaza, la situacin humanitaria es critica, as que tenemos que dar ms apoyo, no menos», zanj.
