Starlink permite a las Fuerzas Armadas de Ucrania comunicarse directamente por satlite, sin el empresario no decide cortarles la conexin
Cuando el periodista de la revistra The New Yorker – e hijo de Woody Allen y Mia Farrow – Ronan Farrow estaba trabajando en un artculo acerca de la influencia de Elon Musk en el aparato del Estado de EEUU, en especial en lo relativo a la Guerra de Ucrania, un portavoz del Departamento de Defensa de ese pas le explic que «hablaremos con usted si Elon quiere que hablemos«.
Que el Estado de EEUU se pliegue sin condiciones a las condiciones de un empresario, por ms rico que ste sea, es absolutamente excepcional. Pero se es el poder que tiene el hombre ms rico del mundo gracias a su empresa SpaceX de vuelos espaciales. SpaceX es la nica va que tiene la NASA para llevar material, vveres y astronautas a la Estacin Espacial Internacional (ISS), y seguir sindolo durante al menos un ao ms, hasta que la agencia espacial estadounidense desarrolle sus propios cohetes.
Pero el poder de Musk en Ucrania procede sobre todo de una divisin de SpaceX – una empresa que hasta este ao no gan dinero nunca – llamada Starlink, que provee conexin a Internet directamente por satlite. En marzo de 2022, tras la invasin rusa de Ucrania, Musk ofreci Starlink a Ucrania gratis, aunque los detalles de la operacin revelan que en realidad una parte de los costes corrieron a cargo de los contribuyentes estadounidenses, britanicos, polacos, y checos. La gran ventaja de Starlink es que ofrece unas antenas que permiten conectarse directamente a Internet a travs de una red de 2.000 satlites de SpaceX, sin necesidad de usar las torres de transmisin que en suelen ser blanco de los ataques rusos. Esta semana, Apple ha llegado a un acuerdo para que las llamadas de emergencia de los iPhones se lleven a cabo por medio de Starlink.
Pero Starlink tambin dio a Musk lo que a ste le gusta ms: poder. Las Fuerzas Armadas de Ucrania se convirtieron en rehenes del empresario, dado que sin Starlink no podan comunicarse. Y el empresario ha decidido que l va a ser quien autorice a los ucranianos a usar la red, lo que significa tanto como aprobar sus ofensivas.
El ejemplo ms claro llega en la autobiografa de Musk escrita por Walter Isaaacson, ex presidente de Aspen Institute y autor de otros libros de xito sobre figuras de Silicon Valley (Steve Jobs) o histricas (Leonardo da Vinci, Albert Einstein). En un captulo del libro, publicado por el Washington Post, Isaacson narra cmo hace exactamente un ao Musk cerr el acceso de Ucrania a Starlink cuando se enter de que Kiev iba a lanzar un ataque con seis drones submarinos (UUV, por sus siglas en ingls) contra la flota rusa en el puerto de Sebastopol, en la Pennsula de Crimea, en la parte de Ucrania que Mosc ocupa desde 2014. Musk, segn Isaacson, «estaba en su tpico modo muskiano hroe-drama», temiendo que un ataque a la flota rusa provocara una respuesta nuclear del rgimen de Vladimir Putin. Ayer, jueves, Musk admiti en su red social X (antes llamada Twitter) que haba rechazado la solicitud urgente del Gobierno de Volodimir Zelenski de abrir una conexin de Starlink con Crimea.
La decisin de Musk permiti a Putin salvar su flota, y retirarla de manera ordenada hacia el puerto de Novorosissk, en Rusia, donde ha estado desde entonces, con una actividad cada vez menor. El mes pasado, drones submarinos ucranianos dejaron fuera de combate el buque de desembarco ruso Olenegorsky Gornyak, que estaba siendo utilizado para llevar suministros a las regiones de Ucrania que Rusia an ocupa, y a un petrolero. En abril haba llevado a cabo un ataque con las mismas armas contra Sebastopol, aparentemente sin xito.
El New Yorker tambin desvela que Musk interrumpi el servicio de Starlink a finales del ao pasado para frenar la ofensiva ucraniana en el sur, probablemente en la regin de Jersn. El resultado fue que los planes militares de Kiev quedaron desmantelados, y el ataque no pudo ser llevado a cabo.
Musk ha pasado de apoyar a Ucrania a simpatizar con Vladimir Putin. El empresario ha propuesto en X un atrabiliario plan de paz que consistira en que Ucrania renunciara a la soberana sobre Crimea el Donbs, esencialmente lo que quiere Putin despus del desastre de su ofensiva sobre Kiev. En junio de 2022 tambin decidi sbitamente cancelar todo el servicio de Starlink a Ucrania alegando que costaba a la empresa 400 millones de dlares (373 millones de euros) anuales, una cantidad que l, con un patrimonio de 215.000 millones de euros, parece que no puede permitirse. Finalmente, Starlink y el Departamento de Defensa llegaron a un acuerdo sobre los costes de la operacin. Empresas como Microsoft prestan ayuda a Ucrania de manera gratuita.
En general, Musk se ha alineado ms y ms con las tesis de Vladimir Putin, al igual que algunos de sus amigos multimillonarios de Silicon Valley, como el inversor David Sacks, un destacado defensor de la invasin. El dueo de Tesla, Starlink y X ha girado hacia posiciones cercanas a Vladimir Putin despus de que uno de los diez hijos que tiene con cinco mujeres iniciara el proceso de cambio de sexo, anunciara que no quera tener ms relacin con su padre, y se declarara marxista. Musk culp de las decisiones de su vstago «al adoctrinamiento marxista de las universidades».